Cuando hablamos del equilibrio e inestabilidad en el diseño, hablamos de que el equilibrio, después del contraste, es la técnica más importándose, basándose por la intuición y percepción de los seres humanos. El equilibrio tiene un orden debido encontrándose un centro de gravedad que se balancea entre dos pesos. Por el contrario, la inestabilidad se atrae por su vista inquietante donde no se equilibra los pesos de un lado ni del otro, como se muestra en la imagen.
El
diseño, la ilustración o cualquier oficio relacionado con los medios tienen una
base teórica y reflexiva que es la clave de cualquier desarrollo práctico
posterior. Una idea compartida por casi todos pero no por todos, pues sin duda
hay muchas maneras de encarar la profesión. Y, sobre todo, cuando llegamos al
día a día, a la pelea cotidiana con la profesión real, cabe decir aquello de
que una cosa es la teoría y otra la práctica. Y la práctica en estos oficios es
lidiar a menudo con plazos y exigencias que imposibilitan cualquier reflexión
previa, y exprimen la capacidad del diseñador de pensar un proyecto a la misma
vez que lo está intentando resolver en la práctica. Pensar y trabajar a la vez,
esa parece ser la cuestión.
En fin, la inestabilidad se ve mucho en los trabajos de diseños gráficos, por lo cual cada uno pone cierto vigor para lograr un determinado y respetable equilibrio para lo propuesto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario